Avance de Metroid: Other M - Wii

De todas las franquicias de Nintendo, Metroid puede ser considerada el paradigma del producto creado único y exclusivamente para los jugadores veteranos... con todo lo que ello conlleva. Por un lado, la serie se aleja de la tendencia actual de darlo todo mascado -cual ave que está a punto de dar a comer a sus crías- para ofrecer viajes solitarios anclados en una narrativa sutil que ofrece reflexión y se encuentra exenta de toda carga épica; en otras palabras, una delicia para el público exigente. Por otro parte, un vistazo a su premisa anula cualquier duda sobre su eterna marginación o las ventas modestas en comparación con sus "camaradas".
Por lo tanto, el hecho de que Other M esté siendo co-desarrollado por Team Ninja podría interpretarse como un intento por mantener la dificultad inherente de la saga -al fin y al cabo, los Ninja Gaiden tumban al jugador novato cinco veces antes de que éste caiga al suelo- pero incluyendo el elemento de la espectacularidad para atraer a los curiosos y así conseguir el éxito que la serie se merece; la sub-división de Tecmo es conocida por sus secuencias cinemáticas ricas en acción pero pobres en coherencia narrativa y en su capacidad de convertir la "física" de ciertas partes del cuerpo femenino en el cebo perfecto para un anuncio televisivo.
Calma y tranquilidad, hasta la fecha no hay ningún indicio de que la nueva aventura de Samus Aran transcurra parcialmente en un resort paradisíaco con sobre exceso de bikinis. La secuencia introductoria sitúa al jugador poco después del desenlace del lejano Super Metroid; el sacrificio de la cría Metroide durante la batalla final contra Mother Brain ha hecho mella en la caza recompensas, hasta el punto que todos sus sueños giran alrededor de este trágico incidente. ¿Acaso han despertado en su interior aquellos instintos maternales que su profesión había logrado reprimir durante tanto tiempo?
El jugador podrá meditar sobre los cambios sentimentales de su heroína favorita mientras recorre un entorno tridimensional que retoma el punto de vista en tercera persona de los Metroid más clásicos sin denostar por ello la libertad de movimiento inaugurada por la sub-serie Prime. El mando se sujeta horizontalmente, al más puro estilo NES, y los controles son tan sencillos como eficaces: el pad analógico mueve a Samus Aran por el escenario, el botón 1 sirve para acribillar a los enemigos -nótese la ausencia de un apuntado manual ya que el juego seleccionará la criatura a batir dependiendo de su posición y distancia, la caza recompensas salta con el "2" o se convierte en morfo esfera con el "A"...
Siguiendo la estela de Super Paper Mario, el jugador puede pasar a un punto de vista en primera persona si apunta a la pantalla con el wiimando. De este modo, Samus podrá investigar con más detenimiento el entorno en pos de aquello que se le haya pasado por alto. Asimismo, la precisión de sus disparos se acentuará mucho más y permitirá que la heroína alcance partes concretas del enemigo. A falta de más detalles sobre el papel de esta novedad en la resolución de puzles ambientales, la única incógnita que queda pendiente es averiguar si el cambio de perspectiva será lo suficientemente rápido como para no entorpecer el ritmo desenfrenado de los combates más intensos.
Tras el tutorial de rigor, la primera parte del juego transcurre en una estación espacial aparentemente abandonada donde alguien ha activado una señal de socorro. La breve investigación demuestra que la filosofía de la franquicia no se ha visto alterada por los recién llegados, y es muy posible que los más veteranos se sientan como en casa cuando se enfrenten al bestiario más débil a este lado de la galaxia como los zoomers o los skree mientras encuentran mejoras para las armas o nuevas cápsulas de vida en los lugares más inverosímiles.
Más temprano que tarde, Samus se topará con un grupo de soldados de la Federación Galáctica en el que se encuentra Adam Malkovich, antiguo compañero de la heroína y futuro patrón de IA -tal y como se vio en Metroid Fusion-. Si la narrativa fuese un hipódromo, aquellos que no apuesten por el caballo llamado "rencillas y tensiones del pasado que regresarán para la ocasión" -curioso nombre- ya pueden abandonar el mundo de las carreras. Independientemente de lo que ocurra, la caza recompensas deberá aliarse con la tropa para derrotar al jefe final de turno, un monstruo púrpura con algunos tentáculos de más que no tendrá nada que hacer si el equipo logra congelarle las extremidades sobrantes para que el jugador pueda apuntar a ellas en primera persona y hacerlas pedazos.
Poca información más se puede extraer de la demostración y las imágenes que tuvieron sus momentos de protagonismo durante las cumbres de Nintendo de la semana pasada. El único peligro que podría hacer que el proyecto se viniera abajo sería dejar a Team Ninja al mando del guión del juego; los finos hilos narrativos revelados hasta la fecha tienen el potencial de revelar aspectos del pasado de Samus Aran que permanecen ocultos o simplemente ignorados, mas el telar se deshilachará si la espectacularidad gratuita le quita terreno al devenir tranquilo y pausado con la que la saga ha ido contando su historia de razas perdidas y piratas espaciales.Comentarios escépticos a parte, Metroid: Other M sólo adolece por el momento de una crítica clara e injustificable: la falta de una fecha de lanzamiento concreta, máxime cuando en el Nuevo Continente ya tienen asegurado su goce y disfrute para finales del mes de junio. ¿Se trata de una prueba más para demostrar la dureza del título o una nueva demostración de la falta de mimo por parte de Nintendo Europa para con sus consumidores? Aquí sí que se admiten apuestas.