Análisis Sniper Ghost Warrior 3 - PS4

Tras la inesperada sorpresa que supuso la llegada del Lords of the Fallen para todos los admiradores del género más “soulístico”, CI Games regresas a una de sus sagas más reconocida para presentarnos Sniper: Ghost Warrior 3. Un ambicioso título, que nos presenta una desafiante aventura en solitario por los gigantescos escenarios de Georgia.
Desamparado en un territorio hostil dominado por incontables grupos paramilitares, el marine Jon North tendrá que hacer uso de todo su entrenamiento militar para sobrevivir en solitario en una zona de guerra y descubrir la verdad tras las intrigas que marcaron la desaparición de su hermano en combate.
Una trama digna de una teleserie militar
La historia de Sniper Ghost Warrior 3 coincide con la mayoría de adaptaciones televisivas desarrolladas por un veterano de guerra metido a guionista: una historia insustancial y predecible, donde marines americanos demuestran su protección divina, derrocando a los tiranos del lugar que diezman a su población sin un sentido claro.
Afortunadamente, la libertad y los valores de EEUU siempre están vigilantes y un pequeño destacamento de marines formado por Jon North y su hermano, se saltan todos los acuerdos internacionales con el fin de exportar libertad a ritmo de gatillo (¿alguien dijo NCIS?).
Sin embargo, este inspirador avance patriótico tiene su contrapartida cuando nuestra primera escaramuza se ve sorprendida por las fuerzas enemigas y conseguimos escapar del lugar gracias al duro y nada claro sacrificio de nuestro hermano.
Herido en cuerpo y orgullo, nuestro protagonista recuperará pronto las fuerzas para hacer frente el solo a todos los grupos paramilitares del lugar y demostrar que la sangre estadounidense derramada vale por cientos de miles de militares extranjeros.
Georgia como nuestro patio de recreo
Una vez superado nuestro drama inicial, el juego muestra una de sus principales características por medio de su gigantesco mapeado, repartido en tres grandes zonas diferenciadas. Con varios kilómetros cuadrados a nuestra entera disposición y las ventajas de una tiempo dinámico con momentos de lluvias y el cambio entre el día y la noche, podremos explorar las poblaciones, emplazamientos militares y orografías del entorno, por medio de las diferentes misiones disponibles desde la base de operaciones.
Y es que desde la protección que nos ofrece nuestro escondite táctico, podremos desarrollar el avance de la historia, por medio de la selección entre las diferentes misiones principales o secundarias, la mejora de nuestro armamento y equipo táctico, así como la posibilidad de descansar un tiempo hasta que encontremos el horario adecuado para la realización de nuestros objetivos.
Con nuestro objetivo definido, podremos desplazarnos por el enorme mapeado por auto, deteniéndonos en algunos de los elementos secundarios escondidos por el mapa, o simplemente acceder a algunos de los puntos de viaje rápidos repartidos en el escenario. Al alcanzar nuestro objetivo, llegará el momento de hacer uso de nuestras habilidades de combate y cumplir la misión desempleando algunos de los diferentes estilos de combate.
Tres estilos para un guerrero definitivo
Para cumplir con las diferentes misiones que nos asignarán durante nuestra partida, nuestro héroe dispondrá de un gran repertorio de habilidades de combate, repartidas en tres estilos diferenciados:
Modo francotirador:
El estilo protagonista en el título se caracteriza por el uso de nuestro fiel y letal fusil de francotirador. En una posición ventajosa y localizando a todos los enemigos del terreno, es fácil terminar con todas las patrullas que intercepten nuestro campo de visión. Aunque este estilo destaque más por su acción a distancia e indirecta, es importante que tengamos en cuenta la preparación del terreno antes de comenzar nuestra táctica.Un disparo fallido puede despertar todas las alarmas de la zona y acabar con nuestra cobertura por medio de morteros enemigos. Para ello, es imprescindible que tengamos en cuenta todos los aspectos vitales para el tiro como la distancia al objetivo, la munición anti blindaje, la velocidad del viento en el momento del disparo, así como el ajuste de la retícula para desarrollar el tiro perfecto en la protección de un silenciador acoplado a nuestra arma. Lamentablemente, este estilo de combate muestra sus principales inconveniencias en situaciones adversas, en las que tenemos que afrontar el avance enemigo en lugares reducidos. Momentos en los que una mira telescópica es tan útil como un peine de viaje.
Modo fantasma:
Para esos momentos en el que la distancia o los obstáculos del entorno supongan un problema para nuestro avance, podemos desplazarnos entre las sombras adoptando el modo de sigilo y sus numerosos accesorios de combate.Gracias al uso de un dron de reconocimiento podremos marcar a todos los enemigos de una manera rápida y sencilla, podremos reconocer el entorno hackeando los circuitos de vigilancia, o interrogando a algunos de nuestros enemigos desprevenidos, así como establecer diferentes trampas por el escenario con el uso de minas o munición de distracción.Las ventajas de un avance táctico de sigilo, pueden ser rápidamente contrarrestadas al menor descubrimiento de nuestra posición, momento en el que nuestro sigilo poco puede hacer contra la poco desarrollada IA enemiga.Modo guerrero:
Cuando todo lo demás no funciona, siempre podremos acceder al modo Delta Force de estilo guerrero. Olvídate de planificar las rutas de acceso, o los puntos críticos de avance y déjate llevar por el calor que emite al cañón de nuestra ametralladora después de vaciar dos cargadores de forma seguida.Puede que el atractivo de un combate directo consiga llamar la atención de los jugadores más impacientes, sin embargo, las complicaciones de una jugabilidad abrupta con armas de corto alcance, hace que nos desesperemos con el apuntado en más de una ocasión.
Aunque las diferentes situaciones de juego siempre acaben decantando la balanza por el estilo francotirador, las combinaciones de los otros métodos de juego pueden otorgarnos ventajas puntuales que consigan dar la vuelta a las situaciones críticas de juego. Según vayamos avanzando en nuestra aventura, podremos ir desbloqueando diferentes mejoras de cada estilo de juego, que nos permitirán acceder a mejores habilidades para nuestro avance por el juego.
Un acabado hipermétrope
Al descubrir el logotipo del Cryengine al comienzo del título, muchos podríamos dejarnos llevar por la gran capacidad visual que consigue desarrollar un motor reconocido para títulos destinados a grandes ordenadores, dispuestos a superar todos los límites del benchmarking.
Sin embargo, este motor muestra sus grandes carencias a la hora de adaptarse a un sistema limitado como sucede en PS4, que en lugar de desarrollar un sistema orientado a sus capacidades, realizan una reducción del rendimiento planificado para PC, presentado unos acabados con grandes deficiencias en el corto alcance y un acabado en los rostros de los protagonistas dignos de residir en la Logia Negra.
Este rendimiento limitado junto algunas de las carencias en la IA de los enemigos o limitaciones de movimientos del entorno, consigue que en más de una ocasión caigamos en la desesperación de ver cómo el título no termina de responder a nuestros movimientos y eche por tierra toda la preparación que hemos llevado hasta el momento.
Un título derrotado por su propia ambición
Es cierto que Sniper Ghost Warrior tiene muchos elementos jugables que conseguirán agradar al jugador aguerrido que disfrute en los títulos shooter tácticos, sin embargo, estos grandes elementos potenciales se vienen rápidamente abajo con algunas deficiencias del acabado final, comenzando por la simplicidad de su historia, los prolongados tiempos de carga al comienzo de la partida, o los atropellamientos entre la jugabilidad y la IA de los enemigos.
Puede que en un futuro, el próximo Sniper Ghost Warrior 4 consiga sorprendernos con un título sorprendente a la altura de cualquier AAA, pero hasta el momento, sólo se queda en un título orientado a una aficionado muy concreto, y que muestra sus grandes bazas en PC.
Lo mejor:
- Las dimensiones de sus grandes escenarios de juego
- El momento en el que toda la planificación de la misión sale como esperas y consigues un tiro letal a más de 300 metros
- La libertad de acción y estilos para cada situación
Lo peor:
- Un acabado al ralentí de la versión de PC y enormes tiempos de carga
- Una jugabilidad abrupta, que acompañada de una IA deficiente puede terminar de echar por tierra media hora de preparación de la misión en el terreno
- La simpleza de su argumento, añadido a las incontables retransmisiones de radio a través del mando, hacen que acabemos cansados del juego rápidamente