Análisis de Twisted Metal - PS3

Blande su enorme cuchillo rasgado y busca por todas las habitaciones sabiéndose merecedor de una caza que cada vez se acerca más, pues huele su miedo. Es uno de los más despiadados asesinos en serie, anteriormente padrazo de familia típica americana, ya sabemos: de clase media, con perro obediente, patrióticos y frecuentadores de cadenas de comida basura. Ha desgarrado lentamente, pero con determinación, cada una de las gargantas que pueblan el caserío. Pero falta alguien, pues la bendita hija de familia ha escapado. El único fallo en la vida criminal de Sweet Tooth. Por suerte le queda Calypso.
No mintamos, a muy pocos jugadores no estadounidenses les hizo especial ilusión la presentación, furgoneta de helados mediante, del nuevo Twisted Metal en el E3 del 2010. Sí, teníamos de vuelta a un icono de los 32 bits, uno de los pocos malvados que merecen tal afirmación. Sweet Tooth volvía de forma definitiva y, tras una serie de contratiempos y amagos de distribución digital, vuelve a la actualidad de los videojuegos en su primer título para PS3 en una época donde, vamos a ser francos, no sabemos si conectará con los jugadores, pues sus momentos de gloria han pasado ¿verdad?
Pero hemos tenido suerte, pues no podíamos estar más equivocados. Twisted Metal vuelve para dejarnos el culo torcido en nuestros asientos y obviar por completo las recomendaciones de las juntas de accionistas. Twisted Metal es un juego desequilibrado, como su protagonista y como muchos de sus jugadores, pero muy pocos títulos pueden competir en el terreno online con esta bestia jurásica, de planteamientos caducos que, pese a todo, no pueden estar más de actualidad.
CARRERAS DE MUERTE Y DESTRUCCIÓN
Seamos sinceros, la saga Twisted Metal no se ha caracterizado precisamente por la calidad en sus diferentes apartados. Desde su creación en el año 95 en PSX la serie ha tenido siempre uns ventas suficientes para seguir ofreciendo nuevas entregas. Mucho más fácil con un gigante del tamaño de Sony detrás. Eso sí, pese a no destacar precisamente donde otros lo hacían, estas carreras de muerte y destrucción sí sabían qué era lo que podían hacer mejor que nadie. Esta honestidad de bienes hizo que se ganara un hueco en las estanterías y en la memoria de muchos jugadores de la época. Ni los desequilibrios jugables ni la, consciente, apertura hacia lo macabro y la serie Z tras la segunda entrega, apartaron las mecánicas de Twisted Metal a los jugadores.
Sin mentir al jugador, la saga ha pasado por cuatro manos diferentes (Single Trac, 989 Studios, Incognito Entertainment y Eat Sleep Play) y ha mantenido como principal reclamo la diversión inmediata. Con una estética que de tan obscena y cutre está más cuidada que la mayoría de productos culturales de la actualidad, Twisted Metal ha sabido priorizar. Primero la diversión y las escenas pregrabadas, luego ya viene todo lo demás. Eso sí, gracias a los avances en los sistemas de ocio actuales, lo nuevo de David Jaffe (God of War) se aprovecha del ya instaurado sistema online –no como en la época de Twisted Metal Black, donde no pasaba de anecdótico- para ofrecer la testarudez hecha diversión con otros jugadores. La bajeza humana personificada en insultos y risas online. La mayor mejora de la serie desde su creación.
DIVERSIÓN MULTIJUGADOR
El modo para un jugador recoge los elementos diferenciadores de la serie y los magnifica. Son tres grandes campañas en las que somos tres de los personajes más interesantes de Twisted metal, Sweet Tooth, Dool Face y Mr. Grimm. Pese a que resulta interesante poder atender a las distintas escenas cinemáticas del juego, grabadas con amor por la serie Z setentera y ochentera, el resto de juego no es más que un largo tutorial para el modo online. Su duración es escasa (unas tres horas siendo generosos) y repetimos mecánicas de juego en cada gran bloque. Eso sí, lo que viene después mejora enormemente el solamente correcto modo para un jugador.
El motivo por el que Twisted Metal sobrepasa a juegos similares y también el porqué de ser la entrega más completa de la saga viene precedido por la inclusión de un modo multijugador de lo más completo que acaparará la mayor parte de horas de juego. Muchos son los modos online, clásicos para la mayoría de jugadores, pero transformados convenientemente para los inusitados vehículos de Twisted Metal. Claramente se posiciona como el núcleo del juego, pero, eso sí, no se sustenta con nada más. Quienes se aburran del mutlijugador se aburrirán de todo Twisted Metal. Fiel a sus principios, se juega su poder de atracción a una única carta.
Combates a Muerte será el modo multijugador (tanto a cuatro mandos como online). Combate a Muerte y Combate a Muerte por equipos cerrarán la cuadratura del círculo en modos clásicos para enfrentarnos a contrincantes. El Último Hombre en Pie y su variante por equipos ayuda a la diversidad de estilos de juego, como también lo hace Cacería y Cacería por equipos, donde todos los jugadores intentarán asesinar a un único jugador. Aseguramos que la sensación de ser “ese” jugador es tan frenética que te induce a un estado de nerviosismo sin adulteración medicinal. Arma Nuclear es posiblemente uno de los más interesantes, cambiando los objetivos de los diferentes equipos (defensivos y ofensivos) de manera aleatoria. Sin duda el corazón del juego.
APARTADO TÉCNICO Y SONORO
El apartado técnico de Twisted Metal se sitúa entre los más compactos que se recuerdan. Pese a que no destaca sobremanera en ningún elemento gráfico al estilo de las grandes producciones de la consola de Sony, Eat Sleep Play ha sabido otorgar de una coherencia muy válida cada elemento del juego. Tanto los coches (y demás locuras sinsentido sobre ruedas) tienen un acabado notable.
Los escenarios son la piedra angular del apartado técnico. Destruibles hasta un límite lógico, podremos echar abajo cada casa y cada elemento llamativo de forma rápida y espectacular. Además, los escenarios pueden transformarse a cada segundo, mostrándose de formas diferentes, convirtiéndose en trampas mortales (y divertidas) para nuestros enemigos. El apartado sonoro llama la atención por su buen gusto –gusto alineado con la locura que representa Twisted Metal-. White Zombie y su versión en solitario, Rob Zombie; Cypress Hill o Airbourne… Muchos son los grupos que harán las delicias de los amantes del rock y el metal. El doblaje al castellano es sobresaliente como casi todas las producciones de Sony Entertainment.
TWISTED METAL-ÍNDICE
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