Análisis de Toy Story 3 - PS3, Xbox 360

Que levante la mano aquella persona que no sienta sincera y tierna admiración por Woody, Buzz, Jessie o cualquiera de los míticos y geniales personajes que pueblan la saga Toy Story desde sus inicios. Bien, veo que hay un par de manos levantadas. Por favor, si son tan amables, abandonen la sala y vayan al hospital más cercano, es evidente que necesitan un corazón capaz de amar. El resto, sed bienvenidos a este análisis de Toy Story 3: el videojuego.
Con la película recién estrenada en los cines españoles, el videojuego del filme aterriza en las tiendas con un único objetivo: llevar la magia de la obra a nuestros hogares, para hacer más llevadera la espera hasta poder comprar los DVDs o Blu-Rays pertinentes. Y es que con Toy Story las cosas funcionan así. Son parte de nuestra vida, como todas las producciones de Pixar. Nos alegran el día, nos hacen reír, llorar y, en definitiva, vivir. Aunque, lógicamente, el videojuego no está al nivel de maestría absoluta de la película, los chicos de Avalanche han conseguido lanzar una producción digna, respetuosa con los personajes e ideal para cualquier tipo de usuario con algo de cariño que dar y ofrecer.
LAS APARIENCIAS ENGAÑAN
Cuando introducimos el juego en nuestra consola pensamos que va a ser demasiado corto. El título no nos lleva al menú de opciones hasta que hemos terminado el primer nivel y, por ello, habrá quien piense que sólo podremos revivir algunas secuencias de la tercera entrega y poco más. Nuestra sorpresa será enorme cuando descubramos que, además de poder meternos en la piel de Woody, Jessie y Buzz en los momentos clave del filme, también podremos vivir nuestra propia aventura en el modo Toy Box o Caja de Juguetes.
Toy Story 3: el videojuego se articula en base a dos modos de juego principales. Por una parte tendremos el “modo historia” y, por otro, la mencionada Caja de Juguetes. Desde luego, Avalanche ha sabido ofrecer material suficiente para los diferentes tipos de público que puede tener la obra. Los más pequeños podrán disfrutar reviviendo los momentos clave de la película mientras que los mayores podrán gozar con una aventura al más puro estilo “sandbox”, misiones y personajes delirantes incluidos.
Por supuesto, estamos ante una propuesta meramente infantil, pero resulta todo un hallazgo descubrir la apuesta por un tipo de juego algo más elaborado en el modo Caja de Juguetes. Todo resulta tan delicioso que nos olvidaremos de algunos errores, sintiendo en todo momento que estamos dentro de la historia de Toy Story. Y es que, gracias al apartado gráfico y los reconocibles modelados de personajes, sentirnos parte de la historia es sólo una cuestión de tiempo.
FÁCIL PERO ENTRAÑABLE
Aquí tampoco hay lugar para la duda. El título resultará bastante sencillo a los usuarios más expertos, aunque conviene recordar que nos encontramos ante una obra destinada a los más pequeños de la casa…bueno, y a los más nostálgicos. Este ingrediente esencial en toda obra de ficción que pretenda conquistar el corazón de los más viejos del lugar está presente desde el primer momento, dejando que el usuario goce con todo lo que ven sus ojos.
El “modo historia” opta por ofrecer una mezcla de plataformas y acción bastante compensada e interesante. Algunos niveles resultarán más sencillos que otros y, además, su duración variará dependiendo del personaje que escojamos. Y es que, en la mayoría de fases podremos alternar entre Woody, Buzz y Jessie, lo que otorga un planteamiento divertido a la propuesta, además de añadir un toque especial para que pequeños y mayores jueguen de forma cooperativa. Ante todo, se busca la diversión familiar (que nada tiene que ver con la casual).Por su parte, el modo Caja de Juguetes también nos permitirá escoger entre algunos de los tres personajes mencionados, aunque no podremos ir alternando su elección durante la partida. Aquí deberemos llevar a cabo una serie de misiones en un pequeño mundo abierto repleto de vida, donde podremos personalizar todos y cada uno de los aspectos que queramos. Aunque la dificultad no ascienda de forma excepcional, resulta una verdadera sorpresa ver como se ha intentado (y logrado) ofrecer algo diferente a los usuarios.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, nos encontramos con una mezcla de géneros muy atractiva para cualquier jugador. Por un lado tenemos la vertiente de plataformas, sencilla y bien implementada, que tiene en algunos momentos un protagonismo especial. Luego está el componente de acción, con secuencias para todos los gustos y, no por ello, menos espectaculares. Para rematar la faena, nos encontramos con una especia de versión “sandbox” de Toy Story que nos ha dejado tan contentos como cuando vimos Buscando a Nemo por primera vez. Y mucho ojo a la misión de Buzz Lightyear buscando a Zurg, idéntica a la secuencia vista en Toy Story 2.
TOY STORY 3-ÍNDICE
PÁGINA 1 - Introducción y modos de juego.
PÁGINA 2 - Apartado técnico y jugabilidad.
PÁGINA 3 - Conclusiones.