Análisis de La Tierra-Media: Sombras de Mordor - Jugabilidad - PC, PS3, PS4, 360, One

En Sombras de Mordor encontramos un mundo abierto dividido en zonas que podemos recorrer libremente desde el principio del juego. El mapa no es muy grande, pero cada una de estas zonas contiene una torre de forja que una vez visitada (se desbloquean subiendo y forjándolas de nuevo) servirá de acceso rápido al lugar desde otra torre, además de punto de reanimación (la más cercana) si caemos en combate.
El mapa nos mostrará los diferentes eventos que tenemos disponibles, desde misiones principales, a secundarias o luchas de poder de los uruks, los orcos híbridos protagonistas del juego. Las misiones principales irán apareciendo conforme las finalicemos, las secundarias según vayamos recorriendo Mordor, mientras que las luchas de poder se irán desarrollando en tiempo real tanto si acudimos a ellas como si dejamos que se resuelvan solas. Unas veces el resultado será consecuencia de nuestras acciones, otras de la naturaleza de los uruks. Pero vamos por partes.
Gracias a las misiones principales, Talion ayudará al espectro a recobrar sus recuerdos y descubrir quién es y por qué nos ayuda en la búsqueda de La Mano Negra de Sauron y el propio Señor Oscuro, al tiempo que vamos acercándonos a nuestro objetivo. Ya sea recolectando información que nos acerque a la Mano Negra de Sauron o siguiendo a Gollum y recuperando artefactos que devuelvan la memoria a nuestro compañero, iremos completando la historia. En paralelo, y para conseguir puntos de habilidad y mirians que intercambiar por runas, huecos en las armas, etc., podemos enfrentarnos a las huestes de orcos que campan por el mapa, liberar esclavos...
En las mecánicas del juego destacan tres sistemas: el de combate, el Némesis y el de exploración. Para la exploración, nuestro personaje tiene muchos movimientos de escalada que le permiten subir a casi cualquier obstáculo natural o construido del camino, un sistema cercano al parkour que no podemos pasar por alto comparar con la saga de Ubisoft Assassin’s Creed, aunque mucho menos fluido que en este. Otro aspecto importante en el juego es el sigilo (y vital), con el que podemos movernos por los campamentos de orcos sin ser detectados y eliminarlos por la espalda sin que nos vean. En este sentido, los orcos no son muy listos, y podemos acercarnos mucho a ellos sin que nos detecten, incluso matar a compañeros que tienen muy cerca y que no se den cuenta. La poca IA que presentan aquí, no se corresponde con la de combate, mucho más organizados y con memoria, para atacar donde más duele.
El combate también nos recuerda a otra gran franquicia, y es que los que hayan jugado a la saga Arkham de Rocksteady se sentirán como en casa rápidamente. En La Tierra-Media: Sombras de Mordor usamos los botones para bloquear, aturdir, golpear o esquivar para el combate. Al principio del juego nuestro repertorio es limitado, pero iremos desbloqueando nuevos movimientos que pondrán más emoción a las luchas. Si nos matan, tendremos una última oportunidad en la que tenemos que mover el joystick izquierdo hasta un círculo y pulsar rápidamente el botón que aparezca en pantalla. En la primera muerte nos será relativamente fácil hacerlo, pero cada vez, el círculo es más pequeño y el tiempo para ejecutar las dos acciones menor.
El montaraz cuenta con tres armas: una espada, una daga y un arco. El arma principal será nuestra espada, con la daga podremos matar con sigilo (y lanzarla a distancia) y con el arco, matar a distancia, de manera sigilosa y más adelante, nos servirá para movernos hasta los enemigos (dos flechas), uno de los movimientos más divertidos de los que podemos desbloquear. Gracias a las runas que iremos recolectando (y que se inserta en huecos de cada arma), podemos ganar interesantes habilidades como recuperar vida al matar capitanes, aumentar nuestro daño, etc.
Para ayudarnos a buscar objetivos, seguir rastros y localizar enemigos y plantas para recuperar vida, podemos entrar en el modo espectro, una especie de modo detective o modo águila, de Batman Akrham o Assassin’s, dos juegos totalmente referencia en este. Además, gracias a nuestro compañero también contamos con la habilidad de interrogar a los orcos, lo que nos proporcionará información valiosa a la hora de enfrentarnos a sus capitanes y caudillos.
El sistema Némesis es la parte más novedosa de La Tierra-Media: Sombras de Mordor, y permite al juego evolucionar conforme avanza y vamos ganando o perdiendo: no nos da tregua, cuanto peor somos, más difícil nos lo pone el juego. Los uruks que consigan matar a Talion, ascenderán de rango hasta llegar a caudillo, ganando poder y haciendo que nuestros próximos combates contra ellos sean más difíciles. Existe la posibilidad de vengarnos, y es que nos recuerdan cuáles han acabado con nosotros. Al intervenir en las luchas de poder o en momentos puntuales en las que localizas a enemigos, podemos decantar la balanza hacia los orcos más débiles o ayudar a otros que hayamos puesto en contra del Señor Oscuro, una estrategia muy favorecedora para nuestra causa.
La variedad en las misiones no es muy grande y como hemos dicho antes el mapa no es comparable con otros sandbox de los que se han lanzado últimamente, sin embargo, sus combates son divertidos y el escenario es manejable (y hay que recorrerlo a pie, lo de los Caragor siempre es un riesgo), y al final, son dos puntos de peso a su favor.
ANÁLISIS DE LA TIERRA-MEDIA: SOMBRAS DE MORDOR – ÍNDICE
- PÁGINA 1 – Introducción.
- PÁGINA 2 – Jugabilidad.
- PÁGINA 3 – Conclusiones.