Análisis de Hatsune Miku: Project Mirai DX - Nintendo3DS

¿Preparados para afinar esos reflejos al ritmo de las canciones más populares de las Vocaloid? Las cantantes virtuales, con Hatsune Miku a la cabeza, vuelven a Nintendo 3DS con una reedición de Hatsune Miku: Project Mirai 2 que nos llega con el título de Project Mirai DX (Deluxe).
Sega y Crypton Future Media se encargan del desarrollo de esta edición que ofrece un lavado de cara al juego publicado en 2013, con mejoras y extras que amplían aún más las posibilidades de este juego de ritmo. El título musical se publicó en mayo de este año, y no ha llegado a Europa hasta septiembre. Para compensar la espera, la edición incluye 19 cartas de realidad aumentada (32 canciones son compatibles).
A diferencia de los títulos de PlayStation, en esta parte de la saga Project DIVA los Vocaloid aparecen con una versión chibi (de grandes cabezas y cuerpos más pequeños), inspirados en las adorables figuras Nendoroid, los que les hace parecer algo más infantiles.
Esta estética más pueril está acorde con el nivel de dificultad del juego. Mientras que en los últimos títulos de la saga Project DIVA encontramos hasta cinco niveles de dificultad (el más difícil una auténtica tortura), aquí solo podremos elegir entre tres: Easy, Normal y Hard (fácil, normal y difícil). Que se vayan olvidando los expertos en los juegos musicales de buscar un reto aquí. Aunque esto hace más corto al juego, se compensa con una extensa discografía por la que merece darle una oportunidad, en difícil.
Fallé 1... El S+ se me escapó entre los dedos, en una segunda vuelta no me pasa
El juego cuenta con dos sistemas de juego: con los botones y táctil. Con el primero tenemos que pulsar los botones correspondientes cuando se indican en la pantalla (en su turno en el raíl que recorremos y cuando un círculo se estrecha en torno a él). En el modo de dificultad más alto nos retarán a usar tres colores diferentes (A, B, Y) y las teclas de dirección para movimientos especiales. El modo táctil es un añadido de esta reedición, y a mí parecer es aún más asequible que el original. En este caso la pantalla táctil se divide en tres colores, y debemos golpear con el stylus sobre el que corresponda en el momento preciso. Además, también tendremos que dibujar líneas hacia la derecha, izquierda, arriba y abajo, o girar el palo en la pantalla durante algunos de los movimientos mantenidos. Aún que tiene más variación de eventos, conseguir movimientos en "cool" es mucho más fácil y llegar a la "S" en difícil casi un paseo de la que tengamos un poco de experiencia en este tipo de juegos.
Una diferencia importante con respecto a la saga en otras plataformas es que las indicaciones en pantalla van montadas sobre un raíl que se va moviendo conforme avanza la música y vamos apretando las teclas correspondientes. Esto aclara algo más el orden de lo que sucede en pantalla, pero a veces tiene truco. Los raíles se retuercen sobre sí mismos, dibujan figuras extrañas o cambian la velocidad sin previo aviso. Hemos dicho que es asequible el juego, sin embargo, tiene puntos que nos pondrán las cosas algo difíciles.
Con 48 canciones, todas ellas muy conocidas y en sus versiones completas, Mirai DX saca un sobresaliente en el apartado de variedad musical, aunque la falta de un modo realmente difícil, de esos que te hacen reiniciar el nivel con desesperación una y otra vez, que te obligan a memorizar algunas partes, y que al final, es lo que te hace mejorar en este género, no se le puede pasar por alto. Entre los temas del juego he encontrado algunos de mis favoritos como 'Deep See Girl' o 'Doremifa Rondo'. Con medio centenar de temas, seguro que los fans de Miku, encuentran varios que conozcan y que se arrastran de un juego a otro.
Project Mirai DX se ha publicado en España en inglés, pero es fácil navegar por sus menús o hacer caso a las indicaciones en pantalla durante las partidas. Además, las letras de las canciones (lyrics) van pasando por la pantalla táctil, un detalle que agradeceríamos si realmente pudiéramos mirar a esa pantalla durante la partida, pero o leemos la letra o seguimos atentos qué teclas debemos pulsar. Es una pena que en la zona de reproducción de música dentro del modo “Hang out” no aparezcan también, ahí sí podríamos disfrutar de los lyrics.
Más que un juego musical
Además del juego musical, el título añade un buen puñado de extras. Una casa para nuestro Vocaloid preferido donde colocar muebles, jugar al reversi o escuchar las canciones que hayamos desbloqueado. Entre este apartado de extras mezcla entre curioso y prescindible, una sección brilla con luz propia: un Puyo Puyo en el que competiremos contra la máquina o un segundo jugador. Gracias Sega.
A favor
- 48 canciones muy conocidas
- Minijuego de Puyo Puyo
En contra
- Solo tres niveles de dificulta: hacen corto y fácil gran parte del juego
- No supone un reto para jugadores experimentados en el género
- Los lyrics aparecen en la pantalla táctil y no se pueden mirar