Análisis de Blazblue Calamity Trigger - PS3, Xbox 360

Una base conceptual puramente Anime, un sistema de juego profundo e intuitivo y un carisma bidimensional heredado de franquicias como Guilty Gear, son los pilares fundamentales de la nueva producción de Arc System Works. Con casi un año de retraso, llega hasta nuestras tierras el fabuloso BlazBlue: Calamity Trigger, un título cuyo planteamiento interactivo podría resumirse en una vorágine de acción, espectacularidad y efectismo visual, engalanada con una enfermiza pasión por el detalle.
El nuevo videojuego de Arc System Works lleva hasta un nuevo nivel de representación visual el carisma bidimensional de los Arcade 1 vs 1 que han marcado la historia del género de la lucha durante generaciones, sin hacer ascos a las más modernas técnicas de representación tridimensional. Pero ojo, nos encontramos con algo muy diferente a lo que hemos podido ver en títulos como Street Fighter IV: los personajes de Blazblue son sprites bidimensionales dibujados en alta resolución, siguiendo los cánones de visualización 720p.
LA LUCHA 2D NUNCA MORIRÁ
Esto es lo que pretenden demostrar estudios como el que nos ocupa. Blazblue Calamity Trigger condensa en su planteamiento muchas de las ideas que han llevado al género de la lucha hasta un nivel de adicción solo comparable a su espectacularidad visual.Los salones recreativos de medio mundo se llenaban todas las tardes, formando inmensas colas alrededor de una máquina recreativa novedosa: Street Fighter II: The Word Warrior era tan espectacular tras el primer vistazo, que nunca olvidarías la toma de contacto inicial con el título: el Hadouken de Ryu o la Spinning Bird Kick (Patada Giratoria Inversa) de Chun Li quedarían grabados a fuego en tu memoria para la posteridad.
Juegos como Final Fight permitían que nos enfrentáramos a decenas de desalmados delincuentes, con la ayuda inestimable de un amigo. Pero Street Fighter II recuperaba la vertiente competitiva de juegos como el desastroso Karate (Atari 2600, 1987) para llevarla hasta un nivel de excelencia totalmente desproporcionado para la época. Enfrentarte contra tus amigos resultaba mucho más divertido que cooperar con ellos, para que nos vamos a engañar, y su planteamiento interactivo fue tan efectivo y redondo, que aún hoy resulta de una perfección impresionante. Muchos títulos bidimensionales más actuales siguen sin poder competir con la jugabilidad de Street Fighter II: Capcom logró algo muy similar a lo alcanzado por Alekséi Pázhitnov con Tetris.
En 1993 una máquina recreativa de contundentes dimensiones, se convertía en el núcleo de multitud de curiosas. Aquel que se atrevía a echarse su primera partida a Virtua Fighter (Sega), introduciéndose en un mundo vectorial con valores espaciales similares a la realidad, no volvería a ver el mundo de los videojuegos con los mismos ojos. El género de la lucha 1 VS 1 se enfrentaba a una nueva revolución conceptual, fruto de los avances en los sistemas de entretenimiento contemporáneos. Pese a ello, títulos como Street Fighter III o Guilty Gear X se encargaron de dejar claras varias cuestiones: el encanto de los gráficos bidimensionales —tratados con el mimo que caracteriza a compañías como Capcom o Arc System Works—, y la efectividad de un sistema de juego bidimensional de 8 direcciones—que tan buenos resultados ha dado en sagas como The King of Fighters o Darkstalkers— son dos aspectos que otorgan a este tipo de títulos un aura especial, algo que está destinado a perdurar por mucho que avancen los gráficos en 3D.
LA FUSIÓN DE 2 CONCEPTOS
Blazblue Calamity Trigger condensa en un mismo videojuego el encanto bidimensional de los sprites clásicos, animados mediante los fundamentos de las técnicas tradicionales, con la representación de los espacios escénicos por medio de herramientas de edición tridimensional combinados con elementos 2D animados. No obstante, si estos escenarios hubieran sido tratados con el realismo de otras producciones, el resultado no hubiera sido tan bueno: las texturas están dibujadas a mano, dando una sensación de ilustración muy similar a los fondos de películas como El viaje de Chihiro. De esta forma, el conjunto queda homogéneo y el acabado visual resulta sorprendente.
EL UNIVERSO BLAZBLUE
Siguiendo la estela de los videojuegos programados por el estudio, Arc System Works vuelve a elegir un planteamiento estético puramente Anime para la concepción de este juego. El contexto dramático podría servir perfectamente para el guión de una serie de animación japonesa, ya que los personajes obedecen a arquetipos bastante atractivos.
Evidentemente, si jugamos el modo historia todos los acontecimientos nos llevarán hasta las luchas 2D que articulan el videojuego que nos ocupa de forma bastante forzada y anodina, por lo que casi siempre la trama cae en el terreno de lo meramente anecdótico.
El hilo conductor del Universo de Blazblue se articula en la aparición de los 6 Héroes, unos individuos de increíble poder que surgieron de lo desconocido cuando la humanidad se encontraba al borde de la extinción. A partir de la derrota de la Gran Bestia, la humanidad aprendió a fusionar el poder de la magia con las ventajas que ofrecían los avances tecnológicos; fruto de esta situación se generaron nuevos problemas y confrontaciones. Desde aquí se articula todo el concepto de Calamity Trigger, ofreciendo un desarrollo diferente para cada uno de los 10 personajes seleccionables en el modo historia.
VARIADOS MODOS DE JUEGO
Aparte del mencionado modo historia, tendremos a nuestra disposición un buen puñado de opciones, que alargarán sobremanera la vida útil del título. A los clásicos modos VERSUS (combates rápidos donde disfrutaremos de forma directa) y TRAINING (escenario perfecto para aprender ataques especiales y poner en práctica las técnicas de cada personaje), se une el modo ARCADE (secuencias de combates contra personajes aleatorios) y el SCORE ATTACK (un modo donde tendremos que obtener la mayor puntuación en nuestros enfrentamientos).
El modo práctica es muy completo, volviéndose imprescindible para encontrar nuestro personaje ideal y ayudarnos a mejorar de forma continuada (al brindarnos la posibilidad de elegir el grado de competitividad de nuestro adversario). Una vez dominado el sistema de juego de Blazblue, el NETWORK nos ofrecerá un aliciente extraordinario para volvernos cada vez más competitivos. No encontraremos Lag en nuestros enfrentamientos online, lo que se traduce en unos combates realmente frenéticos y espectaculares. Podremos avanzar en partidas clasificatorias o disfrutar de los enfrentamientos públicos, y tendremos la oportunidad de escalar posiciones en un Ranking Online que se mantendrá a nuestra disposición en cualquier momento. Eso sí, el nivel es muy alto y cada vez resulta más difícil escalar posiciones en un contexto tan competitivo como es el entorno Online de Blazblue: Calamity Trigger.
VIRTUOSISMO JUGABLE
Pero si hay algún aspecto en el que pueda destacar este Blazblue (aparte del visual, del que hablaremos más adelante), es en el jugable. El videojuego de Arc System Works recoge todos los alicientes que propiciaron el triunfo de Guilty Gear, para adaptarlo a un contexto jugable directo y frenético, muy fácil de manejar pero inmensamente difícil de dominar. Pese a que el elenco de personajes pueda resultar escaso (12 a estas alturas es una cifra demasiado discreta), las diferencias entre ellos y los variados planteamientos interactivos que ofrecen, son elementos que aseguran una experiencia realmente profunda a nivel de jugabilidad.
No tardaremos en enlazar buenos combos, alternando entre los golpes fuertes, medios, débiles y especiales, teniendo en cuenta que el timing definido por la relación fuerza=lentitud/debilidad=rapidez es fundamental para abordar diferentes tipos de enfrentamientos. El salto se torna un elemento fundamental en sus diferentes manifestaciones, dada la tremenda rapidez de los combates y la sucesión de devastadores ataques.
El factor fundamental que define el éxito de una buena defensa, lo encontraremos en la BARRA DE GUARDIA. Cuando la barra se llena a favor o en contra de algún personaje, este queda a merced del contrincante sin poder defenderse. Por otra parte, tendremos la posibilidad de empujar al adversario ligeramente mientras nos cubrimos si nuestra barra de GAUGE está en valores suficientes, pulsando simultáneamente DÉBIL y MEDIO. Si queremos que ese empujón sea más contundente, dejaremos bajo mínimos la barra de GAUGE, lo que hará que nuestra defensa se debilite.
Además de todas estas opciones de defensa, existen movimientos para contrarrestar combos, bloquear agarres y, en definitiva, situarnos de forma ventajosa ante nuestro adversario: cuando este baje la guardia, será el momento idóneo para desatar alguno de los espectaculares golpes especiales con los que cuentan cada uno de los 12 personajes. Dichos momentos resultan realmente impresionantes, pues inundan la pantalla de efectos de luz y símbolos trivales.
Tanto si optas por el encanto y la estética capacidad ofensiva de Noel Vermillon, como si decides dominar el implacable poder de Ragna the Bloodedge, Blazblue ofrece un planteamiento jugable lleno de matices, que se sitúa por encima de juegos con muchísimo más renombre y popularidad.
UNA DELICIA VISUAL
Blazblue es un Anime en alta definición interactivo, así de claro. Si hablamos del diseño de personajes, se mantiene en unos valores bastante altos. Su carisma es evidente, y la delicadeza en la representación de las féminas se complementa con la contundencia en el diseño de los personajes más poderosos. Los sprites bidimensionales en alta definición son una delicia visual, pues poseen multitud de detalles y elementos decorativos en sus ropajes.
En el plano de la animación, los movimientos son elegantes cuando deben y contundentes a la hora de representar golpes devastadores. La animación secundaria se hace efectiva en el movimiento de la ropa, las cintas y los complementos que portan los protagonistas del juego, aunque resulta una pena que la suavidad de dichas animaciones no supere la tasa de los 12’5 fotogramas por segundo, ya que resulta algo molesto al comprobar que los escenarios se mueven a 60.
En la representación de los espacios escénicos interactivos hay volcado un gran esfuerzo creativo. Su representación tridimensional es impecable, cuenta con texturas y efectos de iluminación sublimes y se complementan con los personajes de forma perfecta, al estar realizados mediante técnicas de ilustración digital para la elaboración de sus texturas.
El apartado sonoro ofrece melodías cañeras y efectos muy efectivos, reforzando la acción que se desata en pantalla con cada nuevo y espectacular enfrentamiento de manera precisa.
BLAZBLUE: CALAMITY TRIGGER - ÍNDICE
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